La madera empieza a “crujir”. La puerta y ventanas están cerrada, pero llenan todo de brisa. ¡Son Arcángeles!. Y comienzan a hablar de algo que yo me cuestioné ahora, aunque no les pregunte.
Leí en el periódico la historia de un matemático brillante. Cuenta la historia que a pesar de su brillantez, sufría de esquizofrenia porque decía escuchar “voces” y comunicarse con seres de otros planetas. Es más, afirmaba que ellos le decían como solventar problemas. El científico no tenía reparo en afirmar que esto era cierto y real.
Ya había olvidado lo que leí, pero si me quedé pensando en cuántas personas realmente no “alucinan” y realmente escuchan voces o ven ángeles. Personalmente no escucho ni veo nada, mas bien, yo “percibo” fácilmente, y cuando me pongo atenta logro tener la comunicación telepática. Pero sí conozco ya a varias personas que ven angeles y escuchan. La mayoría no hablan de esto por miedo precisamente a ser tachadas de “enfermas”, “locas” o “esquizofrénicas”.
Pero sé que llegará el momento en el cual predominará el amor y no el miedo, y podremos todos compatir nuestras maravillosas experiencias “sin explicación” a nuestra mente terrenal, que es tan limitada.
En este contexto, recibo estos mensajes. Es mucho lo que hablan. No logro anotar todo.
Arcángeles:
(con respecto al científico que tachan de “esquizofrénico” dicen) Porque cualquiera cosa fuera del control mental es “inverosímil”. Mas el científico escondiendo su corazón pierde la razón del Ser, que es, SER FELIZ en su descubrir del día a día.
Descubrir la Luz de Dios, la Luz del Padre eterno… bondadoso.
Ahí donde se presenta la barrera de la mente, pide a Dios que vele por el corazón y que revele Su Verdad para tí, para los tuyos, mas no importa que ellos no crean, –no en tí–, no en mí como Arcángel (es Gabriel!!) sino, en ellos mismos. En la bondad de su propio corazón.
Mas todo es experiencia y conlleva a la sabiduría. Ustedes dice “mas vale pájaro en mano que un ciento volando” mas yo te digo, suelta a todos de tus manos, no sostengas a uno solo, que el Padre en la confianza del amor que das, ahí mismo entregará, proveerá lo necesario al corazón para que éste encuentre su espacio en el mundo, este y aquel, eso y esto, aquí y allá…
Gloria a todos los hermanos que escuchan, y se escuchan a sí mismos cuando claman por amor.
Clamen porque se les llene de amor y razón de ser su vida terrenal, en ese ahí y ahora que tienen; pues el aquí y el ahora en la paz del Señor es todo lo que hay.
Descansa…