Mensaje 55

Recibido 15 de Noviembre, 2000

Nuestro Padre:

¿…y quién les maneja en soledad?

¿Desesperanza?

Donde no hay FE…

Cuando creen que ya no hay nada que solo lo peor esperan…

Ahí no estoy

Ahí jamás soy pues mi presencia aviva corazones… mi presencia desprecia soledades… desprecia inquietudes…

¡…esas dudas! …de la vida… ¡que normales creen!

¡No son tal!

¡Si es la vida por vivir!

No en soledad

Es solo amar

Es dejarme fluir en ustedes

Soy la brisa

Soy la calma

Soy certeza

Porque SOY

Para ustedes, por ustedes

Que haya calma

Que haya paz

Y a los hijos, que se cuiden, creen que no pierden nada al expresar ese amor tan solo en cuerpo. Esa es una forma de expresión, casual no es, es perdurable, es compromiso, pues comprometidos a ser felices por medio y solo por medio y por causa del amor deben estar ¡quién exige? ¿Qué les da? Soledad… solo exige de ustedes ese dar. Yo solo doy no exijo nada, pero ustedes, ¡cuánto me dan!

Paty, oraciones de la madre ¡siempre escuchadas! las (perdí esta palabra) a la hija en corazón son recibidos soy ese corazón sangrante en amor, por amor, por dar, solo dar.

Y ¡cuánto recibo! recibo de ustedes el verlos en gozo, el verles felices, ¿enfermedades…? esas no existen en el estadio del amor.

Ustedes son la brisa, al hermano enfermo que necesita tanto de ustedes

En amor, en paz, en calma.

Porque SOY.

El día de ayer mi amiga Larisa me comentaba algo sobre los profetas. Yo desconozco mucho y simplemente estuve pensando como los reconoceremos, o si los conoceremos y como saber si ellos son buenos en nuestra vida, o de los falsos. Porque según me comenta mi amiga, hay buenos, no buenos y los que hablan por sí mismos, en mi mente al leer lo que ella me escribió solo me pregunté cómo se puede saber quién es quién. En un mensaje anterior nuestro Padre dice algo sobre los falsos profetas, que cuidado con aquel que profane su nombre. Siempre Nuestro Padre sabe lo que está en nuestro corazón, y me menciona esto de profetas:

–¿Profetas preguntas? No preocupe la misión, mas profetas… los conocerán, no es momento aún, muchos abren caminos en el amor, no preocupe la misión, acogida con amor porque SOY, ¡no más dudas!

Yo sé cuánto puedes dar

Yo solo SOY

Sé que hay dentro de ustedes y me entristezco cuando paran caudal, cuando condicionan ese amor, que de cierto existe, pero lo ensucian, lo contaminan con condición.

YO SOLO SOY sin condición.

No pido nada.

Todo lo tengo.

Todo lo doy.

Pues solo SOY.

Honestidad dice:

–Descansa en la paz del Señor… ¡hermana mía da testimonio es alegría al corazón!

La verdad libera, engrandece, no escondan el gozo de vivir, revivir lo vivido, es objeto compartir gozo, nadie, nadie puede permanecer indiferente a la bondad.

Ustedes todos son bondadosos, nadie permanecerá indiferente a palabra dada en amor, porque son fuente inagotable de LUZ, porque son, solo son esa fuente de LUZ en el nombre del Señor…

Amor a todos, paz y provecho en la vida por vivir… renazcan, revivan, es el gozo en la Paz de El Señor…

Esta última parte que dice Honestidad, se refiere a que hace un par de días me llamo una amiga mía, que conoce lo que me sucedió el día que di a luz a mi hijo, acerca de la visita de un ángel. (Puede leer más acá en el recuento de mi amiga Claudia Allwood). Ella es la editora de un periódico local y me pregunto si estoy dispuesta a compartir esta experiencia para que aparezca en el periódico. Yo no sabía si estaba bien hacerlo, pero cada vez que recuerdo esa experiencia la recuerdo con amor.

Yo no creía en los Ángeles y aun después de esa experiencia tuve mis dudas. ¿Sería mi delirio y por eso vi al Ángel? ¡No, realmente yo sé que fue real! ¡Y ahora no tengo la menor duda! También hubo otra persona en la habitación que lo vio. Así supe que no fue sueño… había oído hablar de ángeles pero realmente nunca había pensado en ellos como seres de luz que están al servicio de Dios Padre por voluntad propia, ahora lo sé. Pero fue necesaria esa experiencia para comenzar a creer. Por eso dice la Biblia: «dichoso aquel que cree sin ver…» ¡Porque su Fe es grande!

Mi fe siempre ha sido débil. He sido de las personas escépticas y prácticas. Ahora todo esto está cambiando, y aunque estos mensajes no son para hablar de mí, si hago estos comentarios pues algunas personas que no me conocen personalmente los leerán.

El vivir esta experiencia de ver al Ángel el día del nacimiento de mi hijo, si hizo un cambio en mí, al darme cuenta que existía mucha indiferencia de mi parte al mundo espiritual del que todos formamos parte. Pero es difícil que todas las personas compartan este gozo y dicha, pues muchos no creen. Conozco gente que ha vivido experiencias similares o que incluso ven ángeles como parte natural de sus vidas, pero esto lo viven aislados, sin compartir pues tienen MIEDO a lo que dirán o piensen otros.

Pero yo si voy a compartir mis experiencias, porque para mí, son un regalo del amor de Dios y sé que Dios está conmigo y además no nos quiere callados.

No importa si ustedes que leen no creen, ¿Qué más da? Pero al menos, lo que sí importa es que sepan que DIOS LES AMA y sus Ángeles les cuidan, con amor, y por voluntad.

Dios no obliga a nadie a nada. Para algunos de nosotros es difícil comprender que algunas personas no creen en Dios, y mucho menos en los Ángeles.

Por eso, el Padre pide mucho siempre TOLERANCIA hacia ideas diferentes.

Para aquellos que no creen en los Ángeles y mucho menos creen que un Ángel guardián les ayuda, pues no importa, pero sepan que aunque no crean, Dios nos otorga lo mismo a todos. Ojalá y tomen lo que les es dado, con amor y pasión.

Para aquellos que no creen en la reencarnación, no importa tampoco; algunas veces es mejor no creer en ciertas cosas para hacer lo mejor con lo que se tiene. Lo que sí importa es que esta vida sea digna, alegre, y sobre todo que logremos sacar nuestra luz interna para que nuestro espíritu y el de nuestros hermanos, se gocen en la paz y el amor de Dios.

Subscribirse

Reciba notificaciones de mensajes a su email.

Email(Obligatorio)
Nombre(Obligatorio)
Scroll al inicio