Recibido el 22 de Agosto, 2000.
El mensaje fue bastante extenso, pero comparto fragmentos.
Siento la presencia de Dios y le digo
–¿qué hacemos?
–Estar en paz, a juicio en el amor, doblegarse, entender, aceptar, dejar libres y amar a todos. Es tan grande el universo… Todos son mis hijos.
–¿Por qué yo?
–¿Por qué no?
–Enséñame el camino
–Tienes que descansar, ir al mar, para tomar energía del agua lo demás lo hago yo.
–¿Cómo saber con quién hablar? porque ¡cuánto me duelen los desprecios!
–Escuchar al corazón, Soy energía pura, como el amor en todas sus dimensiones, EL AMOR NUNCA ACABA, siempre es, siempre está. Hay que ayudar a la gente en el nombre del Señor. Tú eres el auto, yo conduzco, eres el medio, debes mantenerte “limpia” (limpieza para mi es mantenerme en HUMILDAD, yo les pido que oren por mi… a ustedes que leen estas palabras.)
Descansa, tienes paz… comprensión y las palabras que son dadas a todos los corazones
–¿Qué hago?
–HACES
–¡Siento que no hago nada!
–Humilde, gran obra que ha comenzado a extender, no es tu tarea convencer, sólo dar mensajes
–¿Qué hago?
–Descansa, espera
Mi mamá está conmigo y quiere preguntar algo acerca de su trabajo, el Señor le responde:
–No es momento… calma, no desesperes, es tiempo de separar o continuar igual sin abatir el corazón…
Luego, El Señor me pide: que coma bien, mantener cuerpo limpio.
También este día el Señor me regaló visiones, y me explicó por qué en sufrimiento ya vivido he obtenido la gran dicha de servir en Su nombre… y a los que leen esto, si algún día se puede, yo compartiré esto, con mi corazón!.
También dice el Padre que “Todos debemos esperar, hay muchas oportunidades…” “…no nos quiere tristes en el sufrimiento, solo sirve para comprender y crecer…”
“…que tanto hemos crecido como hemos sufrido siempre y cuando realmente APRENDEMOS y no vivimos en el Dolor, sí aprender del dolor pero NO, vivir en él.”
“…Que entendamos las INTENCIONES porque pueden ayudar pero también podemos hacer mucho daño SOLO CON LA INTENCION.”
“Darle nuestra vida a Él es ser felices, ¡no nos quiere tristes!, repite como en anteriores ocasiones que la TRISTEZA NO ES DE DIOS, es “amor” según nosotros, mal comprendido, tampoco la inquietud, él es CERTEZA, el AMOR es CERTEZA. Me habla mucho de la intención, lo que significa… es tan grande la explicación… Entregar la vida a Él es LUCHAR POR SER FELICES, apartar todo pensamiento NEGATIVO; que nosotros olvidamos ver a Cristo en el hermano, hay mucho odio entre nosotros, tristeza, envidia… Todos somos sus hijos, NO HAY NINGUNO PREFERIDO.
Siento que El me abraza (que gran gozo!) es TAN INMENSO SU AMOR ¡Que amor más grande…! Luego me dice: Descansa y agrega que NOS AMA.
A mi mamá le dice que no se preocupe, que el pie sanará (ella está con dolor).